29 de octubre de 2014


   A LA DERIVA      
                                             
                                                        “la deriva solo es un rumbo
                                                          para un buen navegante”                                                                                  
           

Esperaba antes de zarpar, custodios del agua,
fantasías de hadas persiguiendo el nombre de la noche
Los gestos amables eran escenas de un film no realizado,
circunstanciales historias para un tirano.
Siempre había después en la deriva.
Mansa espera que sabe de lo turbio,
punto de paz que ofrecen las orillas.
Todo era paisaje en esa entrega.
Nadie era el capitán y sin embargo el barco se movía.
Extraña ternura abrazando mi piel en ese andar.
Paisaje de infancia mirándome.
Navegaba por las noches, donde las mareas
conquistaban al dios que vivía debajo de las aguas.
Guarida no alcanzada, huecos sin escondites.
Ancla para ver la deriva y seguir en ella, con ella,
inventando un amor que siempre llegará mañana.
A la deriva vive la poesía, imperceptible saber
que tiene rumbo y detesta a los desesperados,
enfurecidos, entristecidos y alarmados,
por una detención que no es ninguna.
Vanas soledades acompañadas.
Incomprensible seda del esfuerzo.

LUCIA SERRANO



 

28 de octubre de 2014

ALTA MAREA



Cuando un hombre y una mujer que se han amado se separan
se yergue como una cobra de oro el canto ardiente del orgullo
la errónea maravilla de sus noches de amor
las constelaciones pasionales
los arrebatos de su indómito viaje sus risas a través de las piedras
sus plegarias y cóleras
sus dramas de secretas injurias enterradas
sus maquinaciones perversas las cacerías y disputas
el oscuro relámpago humano que aprisionó un instante el furor de sus cuerpos con el lazo fulmíneo de
 /las antípodas
los lechos a la deriva en el oleaje de gasa de los sueños
la mirada de pulpo de la memoria
los estremecimientos de una vieja leyenda cubierta de pronto con la palidez de la tristeza y todos los
 /gestos del abandono
dos o tres libros y una camisa en una maleta
llueve y el tren desliza un espejo frenético por los rieles de la tormenta
el hotel da al mar
tanto sitio ilusorio tanto lugar de no llegar nunca
tanto trajín de gentes circulando con objetos inútiles o
enfundadas en ropas polvorientas
pasan cementerios de pájaros
cabezas actitudes montañas alcoholes y contrabandos informes
cada noche cuando te desvestías
la sombra de tu cuerpo desnudo crecía sobre los muros hasta el techo
los enormes roperos crujían en las habitaciones inundadas
puertas desconocidas rostros vírgenes
los desastres imprecisos los deslumbramientos de la aventura
siempre a punto de partir
siempre esperando el desenlace
la cabeza sobre el tajo
el corazón hechizado por la amenaza tantálica del mundo.

Y ese reguero de sangre
un continente sumergido en cuya boca aún hierve la espuma de los días indefensos bajo el soplo del sol
el nudo de los cuerpos constelados por un fulgor de lentejuelas insaciables
esos labios besados en otro país en otra raza en otro planeta en otro cielo en otro infierno
regresaba en un barco
una ciudad se aproximaba a la borda con su peso de sal como un enorme galápago
todavía las alucinaciones del puente y el sufrimiento del trabajo marítimo con el desplomado trono de
 /las olas y el árbol de la hélice que pasaba justamente bajo mi cucheta
éste es el mundo desmedido el mundo sin reemplazo el mundo desesperado como una fiesta en su
 /huracán de estrellas
pero no hay piedad para mí
ni el sol ni el mar ni la loca pocilga de los puertos
ni la sabiduría de la noche a la que oigo cantar por la boca de las aguas y de los campos con las
 /violencias de este planeta que nos pertenece y se nos escapa
entonces tú estabas al final
esperando en el muelle mientras el viento me devolvía a tus brazos como un pájaro
en la proa lanzaron el cordel con la bola de plomo en la punta y el cabo de Manila fue recogido
todo termina
los viajes y el amor
nada termina
ni viajes ni amor ni olvido ni avidez
todo despierta nuevamente con la tensión mortal de la bestia que acecha en el sol de su instinto
todo vuelve a su crimen como un alma encadenada a su dicha y a sus muertos
todo fulgura como un guijarro de Dios sobre la playa
unos labios lavados por el diluvio y queda atrás
el halo de la lámpara el dormitorio arrasado por la vehemencia del verano y el remolino de las hojas
 /sobre las sábanas vacías
y una vez más una zarpa de fuego se apoya en el corazón de su presa
en este Nuevo Mundo confuso abierto en todas direcciones
donde la furia y la pasión se mezclan al polen del Paraíso
y otra vez la tierra despliega sus alas y arde de sed intacta y sin raíces
cuando un hombre y una mujer que se han amado se separan

ENRIQUE MOLINA



Enrique Molina (

27 de octubre de 2014

UN RECUERDO DISTRAIDO


Un día me dije
frente al llano,
es ésta mi mañana,
ésta mi noche,
éstos mis días.

Puse la mirada
más lejos aún que de costumbre
y me tendí al sol,
a esperar que no me visitaran
los antiguos fantasmas.

Lo humano fue,
un pájaro herido
tirado a mi lado,
como si yo mismo
hubiese sido el asesino.

Después la vida
se convirtió
en aquél roble,
plantado por mi abuelo
en Andalucía.

Un recuerdo distraído.


LUCIA SERRANO

6 de octubre de 2014

TE AMO


Te amo escondida en nuestra pasión por los secretos.
Te amo terrible, alucinando un día tenerte todo para mí.
Te amo exaltada por tus brillos que se escapan en cualquier
dirección y tengo miedo.
Te amo amor, te amo, ni el odio ni la sed te alejan de mi lado.
Te amo amor, te amo, y es tan lejos el más allá, que esta vez no
he podido escribirlo.
Te amo en esta soledad, donde tu cuerpo entero está a mi lado,
donde ya no te extraño.
Donde ningún temor se une a mi futuro, juntos vencemos a la
muerte.
Te amo rey de mi corazón y no diré nada a nadie.
No dejaré que los hambrientos desciendan confundidos hasta
nosotros.
Te amo amor, te amo, y es tan fugaz el tiempo que te espera a
mi lado, que vence enamorado todas las distancias.
Te amo amor, te amo, y hoy he decidido atormentada por la
verdad, seguir amándote.
Fuegos ausentes, desconocen la intención del vuelo que nos une.
Te amo amor, te amo, y audaz ante el secreto, decido quedarme
quieta como una piedra antigua y esperar mil veces más tus
palabras de amor, entre invisibles lágrimas, a mi lado.
(del libro de Lucía Serrano “La Ineptitud de los Vampiros” – 1996-1999
"YO LA MIRABA" (cuadro de Miguel Oscar Menassa- 2004)

5 de octubre de 2014

27 septiembre 2014 Presentación del libro de LUCIA SERRANO "CARAMELO" en el Museo de la Reconquista - Tigre

   VIENTOS HURACANADOS

Me acerco al río más ancho del mundo y mientras diviso
lejana la tormenta, vientos huracanados del norte,
mezclan en apariencia todas mis ideas.
Viento de los locos te llaman, porque vas y vienes
en todas direcciones.
Levantas mis vestidos y sospecho la escena de amor contigo,
donde nacen hijos que vuelan hacia el cielo.
Miro a mi alrededorlas hojas caídas,
mueves de los árboles altos, la copa entera y hasta las
raíces deben sentir tus vibraciones.
Camino lentamente gozando al verte danzar tu danza.
Mi cuerpo moviéndose por tu furia, estremece las ansias.
Como un huracán, tiras abajo lo más endeble, lo flojo,
lo que ya no sirve, y te alzas para seguir viajando.
No tienes ningún miedo.
Tu altivez hamaca mis sueños y no quiero verte partir.
Sería capaz de quedarme atada a esa intemperie.
Tierra tenaz donde sospechan los visitantes.
Geografía que das vuelta al vacío de las formas sobre la rivera.
Se alegran las aguas cuando te acercas, ciego, exacto,
soberbio sobre las superficies.
Vientos huracanados, siembras en mis alrededores tu explosiva
carga húmeda, tu niebla, tu oleaje implacable.
Mientras tanto, aguardo las voces que vendrán con la tormenta,
y negras alturas no te detendrán.
A todo lo llevas por delante viento, el humo de algún
pastisal recién prendido, se aviva con tu brisa,
y el paraíso es ese tiempo sin derrotas.
Con el último rayo de luz, celebro el crepitar de tu transparencia,
muevo mis cabellos con el aire que amontonas,
y quiero que termines esta danza macabra,
para volver a casa y mirar a lo lejos las distancias.                                         
Ni siquiera recogí una palabra.
Sombras donde los pájaros ya no están.
Secretos del viento conversando conmigo en esta tarde gris,
para que los hombres levanten su cansancio.
Adonde llegarán las huellas lejanas que te acompañan
Hasta el río me pertenece cuando llegan los huracanados
vientos del norte sobre mi piel felina.
Una frescura de mar desciende empecinadamente
sobre el asfalto, arremolina lo muerto.
Esta noche, no existirá en el bosque, será toda del viento.
Despiertan los recuerdos, y es este aire de silencios,
leve caricia detenida.
Vuelve, que asombraremos al miedo de los débiles,
y alguna gaviota volará nuestro cielo.
Alborotado decir del balanceo, entras al corazón,
para devolverle al viento tus palabras,
sosteniendo el desamparo del aire fresco.
Vientos que hablan conmigo.
Vientos del silencio.
Vientos de luz.
Extraña terquedad de los huracanados vientos.
Hoy no levantaré las velas,
aguardaré en la amarra tus ensueños.

LUCIA SERRANO








3 de octubre de 2014

FUNDACIÓN DE POETAS RENÉ VILLAR - MAR DE AJÓ - NOVIEMBRE 2013

(LUCIA SERRANO, presentó su libro de Poesía "CARAMELO"

ADIOS TRISTEZA                                          

Adiós
tristeza,
geografía
salvaje
a punto
de naufragar.

Estaban en prisión
todas las orillas.