24 de marzo de 2015

CESAR VALLEJO

Y SI DESPUÉS DE TANTAS PALABRAS...

¡Y si después de tantas palabras, 
no sobrevive la palabra! 
¡Si después de las alas de los pájaros, 
no sobrevive el pájaro parado!
¡Más valdría, en verdad, 
que se lo coman todo y acabemos!

¡Haber nacido para vivir de nuestra muerte! 
¡Levantarse del cielo hacia la tierra 
por sus propios desastres
y espiar el momento de apagar con su sombra su tiniebla!
¡Más valdría, francamente, 
que se lo coman todo y qué más da...!

¡Y si después de tanta historia, sucumbimos, 
no ya de eternidad, 
sino de esas cosas sencillas, como estar 
en la casa o ponerse a cavilar! 
¡Y si luego encontramos, 
de buenas a primeras, que vivimos, 
a juzgar por la altura de los astros, 
por el peine y las manchas del pañuelo! 
¡Más valdría, en verdad, 
que se lo coman todo, desde luego!

Se dirá que tenemos 
en uno de los ojos mucha pena 
y también en el otro, mucha pena 
y en los dos, cuando miran, mucha pena... 
Entonces... ¡Claro!... Entonces... ¡ni palabra! 

22 de marzo de 2015

IDEA VILARIÑO


Poeta uruguaya nacida en Montevideo en 1920. Además de poeta, fue crítica literaria, traductora, compositora y educadora. En 1985, tras la dictadura, obtuvo la Cátedra de Literatura Uruguaya en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad de la República. De sus traducciones sobresalen los trabajos realizados sobre Shakespeare, reconocidos ampliamente por la crítica. Su personalidad y sus convicciones la llevaron durante muchos años a rechazar cualquier tipo de promoción de su nombre y de su obra. A pesar de ello, obtuvo varios premios internacionales y ha sido traducida a otros idiomas. Sus poemas, dotados de gran musicalidad, se agruparon en títulos como «La suplicante», «Poemas de amor», «Nocturnos» y «Poesía». Falleció en Montevideo en abril de 2009.


Cuando compre un espejo para el baño...

Cuando compre un espejo para el baño
voy a verme la cara
voy a verme
pues qué otra manera hay decíme
qué otra manera de saber quién soy.
Cada vez que desprenda la cabeza
del fárrago de libros y de hojas
y que la lleve hueca atiborrada
y la deje en reposo allí un momento
la miraré a los ojos con un poco
de ansiedad de curiosidad de miedo
o sólo con cansancio con hastío
con la vieja amistad correspondiente
o atenta y seriamente mirarme
como esa extraña vez-mis once años-
y me diré mirá ahí estás
seguro
pensaré no me gusta o pensaré
que esa cara fue la única posible
y me diré esa soy yo ésa es idea
y le sonreiré dándome ánimos.

DONDE HABITE EL OLVIDO


Donde habite el olvido, 
En los vastos jardines sin aurora;
Donde yo sólo sea
Memoria de una piedra sepultada entre ortigas
Sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.

Donde mi nombre deje
Al cuerpo que designa en brazos de los siglos,
Donde el deseo no exista.

En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
No esconda como acero
En mi pecho su ala,
Sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.

Allí donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya,
Sometiendo a otra vida su vida,
Sin más horizonte que otros ojos frente a frente.

Donde penas y dichas no sean más que nombres,
Cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;
Donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
Disuelto en niebla, ausencia,
Ausencia leve como carne de niño.

Allá, allá lejos;
Donde habite el olvido.

LUIS CERNUDA


19 de marzo de 2015

ELLA Y EL


 III

El era un artista subestimado y sobreestimado.
La obsesión por igualar el feeling del blues, respondió a que buscaba desesperadamente algo que tocara su corazón.
Los amantes del blues, se cuentan entre los últimos exponentes del romanticismo.
El era un personaje habitante de los bajos fondos de cualquier ciudad, pero vivía
encandilado por el brillo ostentoso de la clase alta y sus aburridos pasatiempos.
Se movía con gran inseguridad y se incomodaba cuando se dirigían a él.
Trataba de no mirar a nadie a los ojos, como si cargara con la crueldad de todos sus relatos.
Odió a los profetas y sin embargo, en las noches, fracasado por no poder con su
voluntad, su deuda con Dios aumentaba desmesuradamente.
Nunca le interesó la tristeza de lo venido a menos.
Le preocupaba la resonancia de lo que estaba viviendo en esos momentos, que lo
llevaba a alcanzar el lado sórdido de las cosas, donde las riquezas del mundo
subterráneo que habitaba, eran un anclaje especial para el determinado mundo físico, donde sólo el blues, acompañaba a su propio universo, enigmático y oculto detrás de los vasos del alcohol, o el humo disminuido frente a la luz tenue del final.
Veía a todos los habitantes desesperados por triunfar, alcanzando hazañas que él
había descalificado y desterrado de los actos posibles de su vida.
Su grito radical, era inaudible.
Su imagen favorita, estaba amenazada por los malos tiempos por venir, ya que ellos no le prometían cambiar al personaje.
Las convenciones que nunca aceptó, lo llevaron a una depresión extrema, donde
pasaba encerrado en su habitación y no reconocía las diferencias entre la noche y
la mañana, la claridad y la oscuridad, lo bueno y lo malo, aquello que aprovechara
su taciturno talento.
El sonido que habitaba permanentemente en su corazón, poseía una estética, cuya profundidad difícil de interpretar, no tenía forma de canción.
Intimista frialdad de las mejores canciones del blues, intimista y bárbaro a la vez.
Las formas de reaccionar supuestamente improvisadas, detestaban la alienación
urbana y en el intento de encontrar la aristocracia del sonido propio, fue desesperante escuchar la acústica, vibraciones de un corazón, cansado de tantos éxitos en un mundo dormido.
Las telarañas del olvido no vendrían a salvarlo y teniendo que sobrevivir en una
sociedad donde lo mas importante era ganar dinero, amó las melodías deformes de una estética sensible y diplomática, que jamás consumiría.
Amar el blues, era amar la terquedad de todos los opuestos.
Su espíritu poco común, era difícil de insertar en un mundo vulgar, donde su furia
ya no tenía la altura que la provocara.
Ella tuvo la suerte y la desgracia de haber frenado su último error y sin embargo,
por los equivocados pasos del destino, él no tuvo más remedio que entregarse
y morir.
Ella le gritaba: ¡amor, no regresarán los exploradores promocionando tus leyendas, quédate a mi lado, disimula las quejas de tu inminente regreso!
Irreverencia de una tentativa audaz, creando una desilusión más, antes de
cualquier evento.
Su nuevo chiste fue patético, habiendo decidido ocultarse, quedó visible,
pero muerto.
Ella amó las posibilidades que tuvo de impedir un final tan triste, pero él,
ya tenía firmada el acta de defunción que no le permitiría acordar con ningún
bien y decidido, rechazó todo liderazgo.

LUCIA SERRANO (del libro inédito "COMO LA MISMA PASIÓN)




17 de marzo de 2015

CONSEJOS PARA LA MUJER FUERTE



Post 443 - Consejos para la mujer fuerte
Si eres una mujer fuerte
protégete de las alimañas que querrán
almorzar tu corazón.
Ellas usan todos los disfraces de los carnavales de la tierra:
se visten como culpas, como oportunidades, como precios que hay que pagar.
Te hurgan el alma; meten el barreno de sus miradas o sus llantos
hasta lo más profundo del magma de tu esencia,
no para alumbrarse con tu fuego
sino para apagar la pasión
la erudición de tus fantasías.
Si eres una mujer fuerte
tienes que saber que el aire que te nutre
acarrea también parásitos, moscardones,
menudos insectos que buscarán alojarse en tu sangre
y nutrirse de cuanto es sólido y grande en ti.
No pierdas la compasión, pero témele a cuanto conduzca
a negarte la palabra, a esconder quién eres,
lo que te obligue a ablandarte
y te prometa un reino terrestre a cambio
de la sonrisa complaciente.
Si eres una mujer fuerte
prepárate para la batalla:
aprende a estar sola,
a dormir en la más absoluta oscuridad sin miedo,
a que nadie te tire sogas cuando ruja la tormenta,
a nadar contra corriente.
Entrénate en los oficios de la reflexión y el intelecto.
Lee, hazte el amor a ti misma, construye tu castillo,
rodéalo de fosos profundos,
pero hazle anchas puertas y ventanas.
Es menester que cultives enormes amistades,
que quienes te rodean y quieran sepan lo que eres,
que te hagas un círculo de hogueras y enciendas en el centro de tu habitación
una estufa siempre ardiente donde se mantenga el hervor de tus sueños.
Si eres una mujer fuerte
protégete con palabras y árboles
e invoca la memoria de mujeres antiguas.
Haz de saber que eres un campo magnético
hacia el que viajarán aullando los clavos herrumbados
y el óxido mortal de todos los naufragios.
Ampara, pero ampárate primero.
Guarda las distancias.
Constrúyete. Cuídate.
Atesora tu poder.
Defiéndelo.
Hazlo por ti.
Te lo pido en nombre de todas nosotras.
Gioconda Belli
(Nicaragua, 1948)

A JULIA DE BURGOS

Post 459 - A Julia de Burgos
Ya las gentes murmuran que yo soy tu enemiga
porque dicen que en verso doy al mundo mi yo.
Mienten, Julia de Burgos. Mienten, Julia de Burgos.
La que se alza en mis versos no es tu voz: es mi voz
porque tú eres ropaje y la esencia soy yo; y el más
profundo abismo se tiende entre las dos.
Tú eres fria muñeca de mentira social,
y yo, viril destello de la humana verdad.
Tú, miel de cortesana hipocresías; yo no;
que en todos mis poemas desnudo el corazón.
Tú eres como tu mundo, egoísta;
yo no; que en todo me lo juego a ser lo que soy yo.
Tú eres sólo la grave señora señorona; yo no,
yo soy la vida, la fuerza, la mujer.
Tú eres de tu marido, de tu amo; yo no;
yo de nadie, o de todos, porque a todos, a
todos en mi limpio sentir y en mi pensar me doy.
Tú te rizas el pelo y te pintas; yo no;
a mí me riza el viento, a mí me pinta el sol.
Tú eres dama casera, resignada, sumisa,
atada a los prejuicios de los hombres; yo no;
que yo soy Rocinante corriendo desbocado
olfateando horizontes de justicia de Dios.
Tú en ti misma no mandas;
a ti todos te mandan; en ti mandan tu esposo, tus
padres, tus parientes, el cura, el modista,
el teatro, el casino, el auto,
las alhajas, el banquete, el champán, el cielo
y el infierno, y el que dirán social.
En mí no, que en mí manda mi solo corazón,
mi solo pensamiento; quien manda en mí soy yo.
Tú, flor de aristocracia; y yo, la flor del pueblo.
Tú en ti lo tienes todo y a todos se
lo debes, mientras que yo, mi nada a nadie se la debo.
Tú, clavada al estático dividendo ancestral,
y yo, un uno en la cifra del divisor
social somos el duelo a muerte que se acerca fatal.
Cuando las multitudes corran alborotadas
dejando atrás cenizas de injusticias quemadas, 
y cuando con la tea de las siete virtudes,
tras los siete pecados, corran las multitudes,
contra ti, y contra todo lo injusto y lo inhumano, 
yo iré en medio de ellas con la tea en la mano.
Julia de Burgos
(Puerto Rico, 1914 – 1953)


QUISE SER HOMBRE



Post 415 - Quise ser hombre
Una vez quise ser hombre
para casarme con mi hermana
que ya lleva tres divorcios.
Para amar a mis amigas
que en cada relación mueren un poco.
Quise ser hombre
para fecundar sus vientres,
no de hijos, sino de poesía,
vino tinto, relojes parados,
unicornios azules.
Para decirle a Josefina
cuanto admiro su forma de entregarse.
Para escribirle a Rosi
esas cartas que no llegan nunca.
Llamar por teléfono a Pilar
que espera tantas tardes.
Llenar de caricias prolongadas
el espacio de Beatriz,
que vive sola
y le tiene miedo a los temblores.
Quise ser hombre,
para amarlas a todas y no sentir más
el frío de sus lágrimas en mi playera,
ni mirarlas apagarse,
ni presenciar sus funerales
en sus ataúdes de treinta años.
Quise ser hombre
para invitarlas a volar el periférico,
a bailar descalzas porque el América
le ganó al Guadalajara,
para llevarlas del brazo hasta una cama
donde no tengan que fingir orgasmos.
Pero soy mujer y, aunque puedo
compartir con ellas la poesía,
escribirles cartas,
llamarlas por teléfono,
llenarlas de caricias prolongadas,
volar el periférico,
bailar descalzas,
secar su llanto,
tocar su alma…
No es suficiente.
No les alcanza.
Porque, desde niñas, aprendieron
que los hombres son un premio al que hay que amar,
sin importar si ellos las aman.
Rosa María Roffiel
(México, 1945)






SOBREVIVIENTES

Post 478 - Sobrevivientes
Yo conozco tu locura porque también es la mía.
Somos locas rebeldes, 
locas de estar vivas, 
locas maravillosas, 
estrafalarias, floridas.
Ovejas negras 
descarriadas sin remedio, 
vergüenza de la familia, 
piezas de seda fina,
amazonas del asfalto, 
guerrilleras de la vida.
Locas de mil edades 
llenas de rabia y gritos, 
buscadoras de verdades, 
locas fuertes, 
poderosas, 
locas tiernas, 
vulnerables.
Cada día una batalla, 
una norma que rompemos, 
un milagro que creamos, 
para poder seguir siendo.
Locas solas, 
tristes, 
plenas.
Mujeres locas, intensas, 
locas mujeres ciertas.
Rosa María Roffiel
(México, 1945)

"CA FOSCARI

Fotografía de Zanele Muholi

Te amo como mi semejante
mi igual mi parecida
de esclava a esclava
parejas en la subversión
al orden domesticado.

Te amo esta y otras noches
con las señas de identidad
cambiadas
como alegremente cambiamos nuestras ropas
y tu vestido es el mío
y mis sandalias son las tuyas
como mi seno
es tu seno
y tus antepasadas son las mías.

Hacemos el amor incestuosamente
escandalizando a los peces
y a los buenos ciudadanos de este
y de todos los partidos.

A la mañana, en el desayuno,
cuando las cosas lentamente vayan despertando
llamaré por mi nombre
y tú contestarás
alegre,
mi igual, mi hermana, mi semejante.

 

Cristina Peri Rossi
(Uruguay, 1941)

16 de marzo de 2015

DESAFÍO A LA VEJEZ

Fotografía de Sandy Powers
Fotografía de Sandy Powers

Cuando yo llegue a vieja
-si es que llego-
y me mire al espejo
y me cuente las arrugas
como una delicada orografía
de distendida piel.
Cuando pueda contar las marcas
que han dejado las lágrimas
y las preocupaciones,
y ya mi cuerpo responda despacio
a mis deseos,
cuando vea mi vida envuelta
en venas azules,
en profundas ojeras,
y suelte blanca mi cabellera
para dormirme temprano
-como corresponde-,
cuando vengan mis nietos
a sentarse sobre mis rodillas
enmohecidas por el paso de muchos inviernos,
sé que todavía mi corazón
estará -rebelde- tictaqueando
y las dudas y los anchos horizontes
también saludarán
mis mañanas.
Gioconda Belli
(Nicaragua, 1948)